La acción transcurre en una granja a las afueras de un pueblo del interior, donde vive un matrimonio con su sobrina y un joven que ayudan a los dueños de la granja con las tareas de la casa, a cuidar los animales y con los cultivos de la huerta. La existencia es monótona y tranquila hasta que aparecen en escena una pareja de jóvenes (chico y chica) que llegan para robar y no sabemos muy bien cómo, acaban quedándose a vivir con los habitantes de la granja y revolviendo los sentimientos de los más jóvenes. Por otra parte entran en acción tres estafadores que quieren hacerse con la granja y los terrenos por cuatro duros, para poco después venderlo todo por un buen puñado de dinero. Pero estos estafadores no cuentan con la astucia de los jóvenes. Todo esto tiene como resultado final un montón de enredos y confusiones de lo más graciosas que hace que el público disfrute de lo más y se quede con la boca abierta más de una vez.